loader image

Post

Guía de cómo hacer un podcast con tus hijos

¿Y si hago un podcast con mi hijo?

 

Mi hijo, Héctor, y yo somos fans de los audiocuentos y a él se le da muy bien contar historias. Además, es curioso y siempre está haciendo preguntas del tipo: ¿por qué el hielo pesa? O ¿de qué está hecha la pasta de dientes? Y, por supuesto, hace preguntas como: ¿crees que podré ser policía de mayor? ¿Tengo que estudiar mucho para lograrlo? 

Entonces, me puse a pensar. ¿Y si Héctor y yo hacemos algo juntos que sea divertido y que, al mismo tiempo, aprenda a desarrollar sus capacidades de comunicación y estimule su autoestima y su aprendizaje?

Ya Héctor había probado lo que es estar ante un micrófono, cuando colaboró en un episodio del podcast, te dejaré el enlace en las notas informativas para que lo escuches. Y la verdad es que lo hizo genial. Al comienzo estaba un poco nervioso, pero luego se soltó y fue muy divertido. De hecho, era él quien siempre me preguntaba: ¿mamá, cuándo vamos a grabar otro episodio de la Capitana Faca? 

Le propuse a Héctor que hiciéramos un podcast. Y como él ha visto desde pequeñito cómo hago el mío, se entusiasmó. Y tú te preguntarás: ¿Qué pasos hicimos para comenzar este camino? Aquí te voy a dar una pequeña guía de cómo hacer un podcast con tus hijos. Recuerda que es solo una guía y que todo puede cambiar durante el proceso. Pero siempre hay que tener un mapa, una hoja de ruta, para no perderte. 

 

 

Mi experiencia de cómo hacer un podcast con mi hijo

 

En primer lugar, elige un tema que te apasione. Como dije al comienzo, Héctor es muy curioso y la mejor manera de responder a sus preguntas es preguntando a las personas correctas sobre temas concretos. Por ejemplo, a Héctor le encantaron los audiolibros de las Aventuras de Txano y Óscar, y tenía ganas de conocer a sus autores y preguntarles cómo escribieron los libros. Pero también había un asunto importante que queríamos tratar: ¿cómo lograr tus sueños y no rendirte ante los problemas? ¿Cómo seguir luchando por lo que quieres y no dejar que los demás te digan que no puedes? Me pareció excelente abordar el podcast desde este punto de vista. 

 

 

Y pensé en el formato: haríamos entrevistas a profesionales y les preguntaríamos cómo lo lograron, cómo cumplieron sus sueños. Pero tenía que ser también divertido de escuchar. Así que me puse a pensar, de nuevo, muy profundamente. Y surgió el personaje de Doña Mirábilis, una lechuza muy sabia que responde a preguntas, relacionadas con el tema de cada episodio. Yo le regalé a Héctor una marioneta que es una lechuza y me pareció súper bonito crear un personaje de ficción basado en ella. 

Luego, siguiendo con el formato de entrevista, pensé que sería ideal traer a un personaje histórico al podcast y preguntarle cosas también. Un momento mágico, donde traemos a cada episodio un personaje o donde viajamos al encuentro de dicho personaje.

En segundo lugar, me puse a investigar qué podcast había en el mercado español parecidos al que queríamos hacer. No había ninguno. ¡Yupi! Pero en Estados Unidos sí hay varios con este formato de coanfitrión donde los niños hacen preguntas y conducen el podcast. Así que teníamos la oportunidad de destacar dentro de los podcast dirigidos a niños en el mercado español.

En tercer lugar, comencé a desarrollar el proyecto y a documentarme para escribir los guiones. Héctor me dio varias ideas para los temas. Durante la escritura del proyecto, el título cambió hasta llegar a El Club de los Soñadores, más apropiado con la temática. Después, contacté con los entrevistados y según me iban confirmando, fui escribiendo los guiones y las preguntas. 

Para el contenido de las entrevistas a los personajes de ficción, tuve que documentarme mucho y adaptarlos a un lenguaje comprensible para niños de ocho años. Contacté con varios profesionales de la voz y, a medida que me iban diciendo que sí, cerraba también los guiones. 

Con el personaje de Doña Mirábilis tuve que desarrollar su personalidad y crear un mundo propio, donde las lechuzas tienen hasta su propio pediatra lechucil. 

 

 

Como Héctor aún es pequeño para ponerse a escribir los guiones, solo le pido que me dé ideas para los temas y las preguntas. Pensé en las frases del inicio y del final, para que se repitan, junto con los indicativos y la música o sintonía que será el sello de identidad del podcast. Así, cuando lo escuchen, sabrán que se trata de El Club de los Soñadores. Por cierto, si quieres oír en primicia la sintonía y la frase de presentación con la voz de Maripaz Valdés, no dejes de escuchar el Episodio 125. Pablo Ibáñez Durán también ha colaborado con algunos indicativos.

En cuarto lugar, busqué a una portadista para que me hiciera la imagen del podcast. Ella es Paola C. Álvarez y diseñó la imagen, según la idea que le di: tenía que ser evergreen, es decir, un diseño atemporal y que no perdiera relevancia, porque Héctor ahora tiene ocho años, pero va a crecer y necesitaba algo que perdurara y no tuviera que cambiar cada año o cada temporada. 

En quinto lugar, busqué un estudio donde grabar con calidad. En mi casa no puedo hacerlo. Vivo en una zona donde hace demasiado ruido. Estoy grabando los episodios en Sound Spectrum Studio, los días sábado porque durante la semana Héctor tiene colegio. Programé y organicé todo para grabar durante las mañanas de tres sábados. Y mi niño se comporta como todo un profesional: se levanta temprano, se prepara y llegamos muy puntuales. Porque el tiempo es oro en un estudio de grabación. Y la verdad es que hemos sabido aprovechar al máximo las horas. Claro que es importante tomar en cuenta que hacer este tipo de actividad puede cansar a un niño y por esto hay que hacer pausas cortas y merendar, por supuesto. 

Y en sexto lugar, aunque tal vez debería ir antes de todo, presenté este proyecto a una plataforma llamada Mumbler, para ver qué posibilidades había de monetizarlo. Pol Rodríguez me dijo que era un proyecto precioso y me dio algunas directrices, como por ejemplo, ofrecer la primera temporada de El Club de los Soñadores completa, crear una promoción que generara intriga, hacer un trailer y una sinopsis, ir anunciando en las redes sociales lo que estás haciendo, etc. Yo hice un pequeño trailer promocional, con fotos y vídeos de las dos primeras sesiones de grabación y quedó muy bonito. Esta también es una forma de crear expectativa. 

 

Algunos consejos de cómo hacer un podcast con tus hijos

 

Ahora bien, creo que lo más importante si quieres hacer un podcast con tus hijos es empezar. No esperes a que todo sea perfecto en el primer episodio. Date tiempo para evolucionar y aprender junto con tu hijo. Date tiempo para que tu programa vaya creciendo durante el camino. Tampoco hace falta que te vayas a un estudio de grabación, como hice yo; puedes comenzar en tu propio hogar, con un micrófono casero y un programa básico de edición como Audacity. Y puedes subir los episodios a plataformas como Ivoox, por ejemplo. Al hacerlo todo tú, tienes plantillas de portadas de podcast en programas como Canvas, que es gratuito y fácil de usar.

 

 

 

Mi caso es diferente, porque yo quiero monetizar los contenidos de El Club de los Soñadores y por este motivo, las calidades tenían que ser óptimas.

Los podcast infantiles son una bendición tanto para los oyentes como para los futuros podcasters. Las familias tienen otra alternativa diferente a las pantallas de las tabletas o teléfono móviles que funciona muy bien a la hora de educar y distraer a sus hijos. Hay que incentivar la escucha activa. Los niños tienen la oportunidad de subirse al tren de los podcast y hay un gran abanico de posibilidades para crear nuevos contenidos. 

Así que si alguna vez has tenido el sueño de hacer un podcast con tus hijos, este es el momento de hacerlo realidad. 

¿QUIERES NARRAR
TU PROPIO AUDIOLIBRO?

Aprende a crear el audiolibro de tu historia con mi curso digital

¿QUIERES NARRAR
TU PROPIO AUDIOLIBRO?

Aprende a crear el audiolibro de tu historia con mi curso digital